Siempre me gustó mirar a la gente en si, cuando voy por la calle y hay una pareja me gusta ver como se miran, como entre risas y besos tienen un lenguaje de ellos dos, lo mismo los grupos de amigos o Los nenes que juegan como si se conocieran de toda la vida.
Me gusta prestar atención a los detalles ,a la forma en la que la gente se toca, se ríe y más importante: como se miran.
Yo se que la mirada no está infravalorada, la historia esta llena de poemas dedicados exclusivamente a las miradas, pero siento que no escribimos lo suficiente. Las miradas son profundas, cargadas de sentimientos o de nada.
Y muchas veces dicen que la nada Es justamente eso, nada, pero eso es porque no lo pensaron de más. ¿nunca los miraron con cara de nada? Con los ojos caídos, desinteresados, una mirada que parece perdida pero que tampoco se quiere encontrar, miradas que miran más allá de uno, que se siente como si una daga te atravesará de un lado al otro.
Las miradas son fuertes, significan muchisimo y además son la manera más primitiva que tenemos de recordar lo que amamos.
Cuando te miro, te miro tan concentrada, te miro como si fuera la última ves que te voy a ver y necesito recordar cada detalle de tu cara. Te miro desde adentro hacia afuera y desde afuera hacia adentro. Te miro con significado porque necesito tenerte grabado en la cabeza, porque cuando estoy sola y la vida parece odiarme, me acuerdo de tu mirada y ahí todo se calma. Te miro con fuerza y con amor, te miro con tristeza y con alegría, te miro con todas las sensaciones que se me permiten porque te mereces ser admirado de esa forma. Te miro, te miro y no entiendo como es que no tenes más de mil poemas con tu nombre grabado, te miro y no entiendo como es que esos poemas no los escribí todavía. Te miro para acordarme siempre de vos aunque no te vayas, te miro porque es la manera más primitiva que tengo de acordarme que todo está mejor, si es que vos me estas mirando
